jueves, 23 de enero de 2014

Los otros territorios del Lynx Pardinus

Una vez más nuestro la brújula de nuestro coche marcaba dirección Sur, una vez más el destino era Sierra Morena, una vez más en busca del gran gato, el felino más amenazado del mundo, el Lince Ibérico (Lynx Pardinus).

Las noticias de los amigos naturalistas no eran muy alentadoras, "se mueven poco, no se dejan ver", pero la peor noticia nos la trae la prensa, "la población de lince ibérico de Andújar, la más importante de la Península de este felino en peligro crítico de extinción ha caído un 16% de los últimos años, parece ser que los censos muestran que a final del 2013 campeaban 33 linces menos que en 2011.

La crisis, también ha llegado a la casa del lince, ya que parece ser que el número de cachorros ha caído en unos 40 ejemplares en los dos últimos años, la falta de alimentación (los conejos especialmente) han provocado esta situación tan desagradable.
Pero el Lince tiene que emigrar a otros territorios en busca de alimento, tiene que desplazarse y en su camino se encuentra con barreras infranqueables, carreteras y vallados que tiene que cruzar, en ocasiones las luces blancas que se acercan a gran velocidad lo ciegan y contamos una víctima más en las carreteras, el pasado año se certificaron 14 linces muertos por atropello entre las poblaciones de Sierra Morena y Doñana.



EN TODO EL MUNDO HAY ALGO MÁS DE 300 LINCES IBERICOS, si algún día desaparece esta especie los únicos responsables serán los países de España y Portugal.

Nuestro primer día de campo fue junto a Jesus Molina, guarda de campo y caza, pero que en sus largos días en la Sierra se ha encontrado con el lince, nos encontramos en Bailen, relativamente lejos de la Sierra de Andujar (lugar donde tradicionalmente se preparan las esperas para la observación del felino), al salir de la ciudad nos sorprendió que realmente nuestro destino era la parte este de la autovia de Madrid a Cordova, justo al otro de la Sierra, el mismo nos contó que algunas veces cruzan por gateras las vallas de la autovia, un olivar era nuestro destino. Entre los puntos kilométricos 300 y 315 de la A4, justo en un tramo siniestro para los linces.

Aquella preciosa tarde, paseamos por las grandes extensiones de olivar escuchando a Jesús, que de no ser por los rastros que nos mostraba no dábamos crédito a sus historias, a sus encuentros con "Marga", con que cariño la nombraba, como él trabajaba en la concienciación de los cazadores y los agricultores, él se siente orgulloso de su trabajo y de estar haciendo algo importante de vigilar un GRAN TESORO.


Después de un bello atardecer, teníamos que reponer fuerzas y nos llevo a un lugar especial, la casa de postas de 1766 de Villanueva de la Reina, donde Manuel Marín con gran entusiasmo nos relato algunas anécdotas de la batalla de Bailen, entre unos maravillosos dulces, ¿Fue allí donde se firmaron las capitulaciones de la Batalla de Bailen (1814). Pero el Lince y sus movimientos nos perseguían:
  • Un agricultor que disfrutaba de su cerveza de la tarde: "Ayer mismo estábamos recogiendo las aceitunas y el lince se paseo por nuestro lado, allí justo al otro lado de la carretera".
  • Manuel Marín, propietario de la casa de postas: "Hace unos días, justo en la rotonda de la entrada estaban una pareja de linces tomando el sol".
El Lynx Pardinus está en peligro crítico de extinción pero tendremos de redoblar esfuerzos en su conservación.

1 comentario:

  1. Buena crónica reivindicativa del territorio y espacio del lince ibérico. Somos y seguiremos siendo los principles responsables de su conservación.
    Un saludo de 'Ojolince y Sra.'
    http://ojolinceysra.blogspot.com.es/
    PD. No hemos visto aún al hermoso felino, esperamos conseguirlo algún día; el apelativo fue cosa de los amigos.

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